19 agosto 2013

Presentación: "Devoradas", de Juan Ignacio Correa A.


Resumen del argumento

Un hecho tan nimio como “tomarse una taza de café” con un alumno tiene el efecto de alterar por completo el mundo de María, microcosmo que hasta entonces ella controlaba en todos sus aspectos. El rumbo de su vida deja de ser lineal e inmutable, y reaparecen fantasmas que María creía enterrados. También las caretas y bastones que en otras etapas de su existencia le permitieron soslayarlos, ahora molestan. Debe elegir entre profundizar la incipiente relación originada en esa “taza de café” o consolidar su promisoria carrera académica estadounidense.

De ese modo, la trama circula alrededor de la relación obsesiva que se instala entre esa profesora universitaria, que se acerca a los cuarenta años, y Pedro, el estudiante más destacado en la escuela de ingeniería, trece años menor que ella. Se trata de un estudiante desfigurado por la omnipresencia materna y que, con su encanto y desenfado, se transforma él mismo en una adicción para María. Así, su amor termina siendo también una medida de la desfiguración de todos los demás protagonistas.

La historia se despliega en un caleidoscopio de otras tres voces femeninas cuyos puntos de vista deambulan entre la acogida, el desengaño y la frustración; haciendo que el lector vacile entre juzgar o compadecer, despreciar o entender; enfrentándose a un espejo trizado que indaga en sus propias fragilidades; donde se ve horrible y se odia, o se ve hermoso y se ama.